La semana pasada tuve la oportunidad de leer en el suplemento dominical XLSemanal una entrevista realizada al cirujano Pedro Cavadas (foto adjunta) que me dejó muy buen sabor de espíritu -de boca, suele decirse-.
No sólo es una "Eminencia" en su profesión ya que trata, incluso, a pacientes rebotados de otros médicos, sino que además es una "Santidad" pues lo que gana se lo gasta en África operando gratis y trae a Valencia aquellos pacientes que no puede operar allí, a través de su propia fundación que no sólo opera y forma cirujanos, también escolariza a muchos niños.
Reconoce ser un "converso" por sus viajes al África real, auténtica que le han permitido ver otras formas de vivir, sin las tonterías nuestras, por supuesto; le importan mucho los pacientes, aunque no se pone bata de médico y aún tiene tiempo para sus dos niñas chinas adoptadas.
Hoy en el mismo suplemento, acabo de leer una carta que ha sido premiada por su testimonio, por la esperanza que infunde a los demás al relatar las vicisitudes que ha padecido su autor y la sensación de sentirse arropado por el equipo médico y sanitario, por la lucha y entrega de los mismos frente a las adversidades.
Con todo este bagaje, sabiendo que hay gente muy competente y excelentes personas, esta tarde, iré con plena confianza... a ingresar en el hospital.
Al llegar a su casa me ha sorprendido su petición: "Cuando pase algo, Julián, ayúdales con los papeles y demás."
Primero, abajo, antes de subir, ha preguntado qué porcentaje de su pensión le quedará a su mujer.
Hace días sé, por sus hijos, que no hay remedio que ayude a curar el mal que padece. Ya no tengo que ir a verle al hospital, pues le han dado el alta "definitiva" en el mismo.
Hoy me lo he encontrado en el jardín tomando un poco el aire y el sol, hace buen tiempo, pero él tiene el semblante entristecido por el malestar y preocupación que le produce su enfermedad.
Apenas ha permanecido diez minutos y luego ha querido volver a su casa.
Corroborando lo escrito hace casi dos meses, admiro y respeto a toda mujer, en general, por el simple hecho de serlo y, quizá, por formación, no tan igualitaria como ahora se pretende, y en la que me enseñaron que el hombre debe tener ciertas deferencias hacia ella.
Me pueden tachar de anticuado, pero no me importa; sí me indigna y preocupa, por otra parte, ver tan iguales en sandez y malos modos a tantos jóvenes de hoy en día, en ésto, creo, pierden más ellas y a la larga todo el mundo.
Esta vez quiero dejar constancia, en este rincón, de dos mujeres que por diferentes motivos causan, en mí al menos, admiración. Además entiendo que debieran ser ejemplos, difíciles de imitar es cierto, para todos, pero en especial para sus congéneres.
Admirable mujer
Ayer, junto a la urbanización en que resido me encontré, por casualidad, con la madre de Consuelo, vecina y amiga de mi familia desde hace unos 25 años. La mujer sólo tiene 90 años y vive sola.
Aún yergue su figura y camina despacio. Viste con sencillez y utiliza ropas de colores tenues acordes con su edad. Éso sí, tiene un punto de coquetería: gusta de pintarse un poco el rostro empleando trazos suaves y estilizados en las cejas, labios imperceptiblemente retocados y colorete breve y escaso en las mejillas. ¡Me hubiera gustado verla en su juventud!
Posee todavía una cabeza con memoria prodigiosa, de superordenador, en una palabra. La conversación que manteníamos transcurría sin mayor trascendencia, ya que los temas tratados eran todos banales, hasta que, en un momento dado, a raíz de decirle que su vida llenaría un libro, contestó, con modestia, que ella, en su vida, no había hecho nada especial o relevante para salir en ningún escrito. Y con naturalidad, pero con firmeza, me ha pedido que omita su nombre.
Vida sencilla,
sin importancia,
sin pretensiones vanas.
Ha traído cinco seres al mundo
y quedado luego viuda
con sus 36 jóvenes años.
Y habiendo tenido que enterrar
-llorando su corazón, por dentro-
a uno de sus hijos no ha mucho,
¿es demasiado pensar
que sus noventa años
con vivencias innumerables
dan para llenar, por lo menos,
un hermoso libro?
* * * * * * * * *
Wafa Sultan
Hace pocos días tuve la ocasión de escuchar, por segunda vez desde el ya histórico 11 de Septiembre, a esta mujer de origen árabe que, a mi modo de entender, demuestra tener en su madurez -nació en Siria, en 1958- unas sólidas ideas y una rotundidad al exponerlas, que, por más que lo intento, no consigo recordar persona alguna actual que se haya manifestado de igual modo.
Una mujer valiente, ¡sí señor! Como suele decirse, los tiene bien puestos. Por supuesto está amenazada. Por lo que he leído sobre ella, reside en California, es psiquiatra, analista política y crítica del Islam.
Es famoso el debate que mantuvo el 21.02.06 con Faisal Al-Qassem y con Ibrahim Al-Khouli sobre la teoría del choque de civilizaciones de Samuel P. Huntington. El vídeo de dicho debate, con subtítulos, dura unos seis minutos, pero merece la pena visionarlo por aquellos que no hayan tenido la oportunidad de verlo.
Está muy claro, en todas, todas las religiones, cuanto más fanatismo, peor... para todos.
Indignante, una vez más: Gilles-Éric Séralini, biólogo molecular, dice en una entrevista: "...La Onu dijo hace 15 años que con 500 mil millones de dólares se acabaría con el hambre en el mundo y no encontraron el dinero. En tres meses, todos los países industrializados han encontrado el doble de esa cantidad para alimentar a los bancos y las grandes compañías."
Y lo grandes países (de pacotilla, claro) reunidos hace dos días en Italia. ¿Para salvar el mundo? ¡Ja!
Burkas.
Me causa estupor la idea que tienen algunos jóvenes de Irán que forman parte de la policía política de dicho país, que piensan que su pueblo cada vez va mejor y que el único problema son las mujeres que no se cubren adecuadamente. ¡Toma ya! Ya lo decía el otro: lo malo no es que estén éstos, sino que los que pudieran estar son peores. En Afganistán, un marido puede asesinar a su mujer y quedar impune; además, el presidente Karzai ha firmado una ley que legaliza la violación conyugal. ¡Qué dos perlas legislativas!
* * * * * * *
Me da ánimo leer a Jacob Ziv, galardonado con el premio de Nuevas Tecnologías de la Fundación BBVA, diciendo, al hablar de los algoritmos, que lo simple no sólo es bello sino que, ¡además funciona!
¡Diantre! Me he equivocado en la interpretación, dice "lo" simple, no "un" simple. Tomo nota.
Soy de los que opinan que no hay nada nuevo bajo el sol, que nadie inventa nada, que utilizamos el verbo inventar como sinónimo de encontrar, pues nadie puede hacer aparecer de la nada, de la no existencia, un simple objeto inanimado.
Viene esto a cuento de que, siempre que escribo alguna frase más o menos coherente e inteligible, sospecho que ya alguien, también, lo ha expresado. Por éso, cuando tengo alguna ocurrencia, de tarde en tarde y poco o nada original seguramente, tiendo a usar, para exponerla, sobre todo al hablar, la siguiente coletilla: "...como decía el otro..." Quizá haga ésto para, inconscientemente, echar la culpa de mi poca imaginación o seguridad a otro, entendido como ente imaginario.
Lo que si afirmo es que, aunque digamos y escribamos las mismas palabras, al pie de la letra, el alma y sentimiento imbuidos en las mismas pueden ser no sólo distintos sino contradictorios, tanto si las decimos, escuchamos, escribimos o leemos.
Algunos ejemplos: Cuando dos personas dicen amarnos, aunque empleen la misma frase palabra por palabra, siempre nos sonará distinto y el sentimiento originado en nosotros será diferente. En un político, a veces, al expresar que la coyuntura actual no va por la senda esperada de mejora ni tan rápida como debiera, realmente lo que está diciendo es que ésto va de mal a peor y deprisa. Otro; al usar la palabra chatear se está diciendo: ¿beber chatos? ¿comunicarse a través de internet por medio de mensajes escritos e instantáneos? o puede significar hacer chato a alguien aunque sea con un puñetazo? Es broma, claro.
jueves, 9 de julio de 2009
...un escribidor (2)
Noticia cabecera de periódico en primera página: "El Principado se gasta 700.000 euros para traducir su web al bable." Debajo, en letra más pequeña dice que "...para que http://www.asturias.es/ se pueda consultar en asturiano e inglés." Saco algunas conclusiones que relaciono a continuación y que, no necesariamente, van por orden de importancia:
- Manipulación o mentira; en un sitio pone para traducir al bable y luego dice que al asturiano e inglés, en qué quedamos?
- Caradura y despilfarro de los políticos que para una cosa tan importante como esa (en mi opinión) gastan un dineral de todos, que equivale, lo dice el mismo periódico, al que Gijón destina a ayudas sociales...qué jetas. Me gustaría saber cuántos presupuestos han pedido y a quién corresponde cada uno de ellos.
Hay políticos en Asturias y los ha habido
que en asuntos del estado importantes han sido.
Mas a fuerza de ser, por sus actuaciones, grandones
sus realizaciones de humo les hace simples fartones.
¡No me toquen la gaita!
- Dichosa Constitución que en vez de unir provoca división y en lugar de dar claridad en la expresión introduce confusión. Debería estar hecha a base de números que son invariables y no con palabras que cada una de ellas puede tener numerosas interpretaciones.
- Tal parece que somos más felices buscando y resaltando lo que nos diferencia, que no es tanto, que aquello que nos iguala y que es muchísimo. Como decía el otro, la distancia entre una persona y otra, en cualquier análisis y aspecto, es tan insignificante como el grosor de un cabello.
El pasado día 28 tuve un percance en la gran acera que discurre junto al parque de Isabel La Católica, de Gijón. Caminaba por ella tranquilamente, charlando con mi cuñada Domi acerca del nuevo carril bici instalado en dicha acera, -hay quien piensa que más que carril bici parece pista de aterrizaje- cuando de súbito fui arrollado por "el carrito del helado"; fuera bromas, me "embistió" por la espalda un paisano empujando un carro enorme para la venta de chucherías en el citado parque.
Viene todo ello a cuento, para decir que, por dicho motivo, por estar fuera de combate que se dice, no pude asistir a la primera cita del Programa de la palabra organizado, para este verano, por el Círculo Cultural de Valdediós y que se celebró el viernes día 3 en el salón de actos del Monasterio de Santa María de Valdediós, marco incomparable, bucólico y lírico donde los haya.
Dicho acto consistía en la lectura de poemas por los cuatro poetas que comparten el libro "A pesar de todo", presentado por José Luis GarcíaMartín, poeta y escritor, entre otras muchas facetas, a quien admiro y leo con delectación. Al menos, puedo resarcirme pues tengo conmigo un ejemplar del citado librito cuyo inicio escrito por el profesor García Martín a modo de "Notas de un cuaderno chino" me ha entusiasmado por las perlas literarias en él plasmadas. A modo de ejemplo valgan estas frases que he escogido entre dichas notas: "Observa a los hombres como observas las flores; no tomes partido por ninguno" "Para el que sabe mirar, una vuelta por su jardín vale lo mismo que tres vueltas al mundo" "Si no aprendes a paladear el sabor de estar enfermo, no conocerás del todo el valor de la vida".
Humo de cigarrillos excesivos. Murmullos de conversaciones semi privadas. Los cafés sobre la mesa aún calientes. La pareja se sonríe y acaricia mutuamente.
Charlan de sus cosas nimias e importantes, divinas y humanas.Apagan los cigarros, se levantan y tras pasar por caja vuelven a la oficina donde trabajan en una luminosa planta acristalada.
Salen del ascensor: "Te quiero, cielo. Llámame luego para comer!"; "Yo, también, te amo cariño. Lo haré". El beso es largo y cálido.
Rosa y Bego, sin mirar atrás, se dirigen, cada una por su lado a su despacho...Ambas caminan sonriendo...
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El día del Orgullo Gay se celebra el 28.06 y este pequeño relato lo escribí con motivo del día del libro el 23.04.09.
Ayer en el periódico Qué! de Asturias leía en la página 8 la noticia de que Madoff, el pobre, era condenado a pasar -que no a penar y esto es mío- 150 años en prisión por haber estafado unos 50.000 millones de dólares, dólar más o menos, que tampoco es cosa de discutir por la cifra exacta, vamos.
Pero lo que me ha hecho mucha gracia es la declaración que le atribuyen: "Cometí un terrible error". Vosotros qué pensáis, que se arrepiente? O sois de mi opinión y entendéis, también, que quiere decir: qué pena, con lo bien que iba el negocio!
Y ahora viene lo bueno, para mí al menos; en la página siguiente, la 9, viene un anuncio a todo trapo en el que un grupo inversor asegura, a la persona que les deposite su dinero, nada menos que el 3% de interés mensual, el 36% anual !!! y al final lo más gracioso: "...Y cuando quieras recuperar tu dinero invertido lo podrás hacer casi al momento." Lo de casi me ha llegado al alma. Y la gente, todos nosotros, diciendo que hay crisis; qué poco entendemos ! JA!
Posdata: Y de satírico nada, eh! Cualquier día salen nuevas viñetas cómicas con los Hermanos Zipi, Zape y Zetape... Al tiempo!
