COPA DEL REY

Rectificación

Como rectificar es un ejercicio muy saludable, por lo menos moralmente, yo lo voy a hacer.
Ayer caí, ingenuamente, en la trampa de TVE y creí, en mi ignorancia, que las dos aficiones se habían comportado muy correctamente, cuando la verdad es que su comportamiento ha sido un escándalo mayúsculo.
Esto sólo ocurre en este país llamado España y donde, al parecer, a nadie se le cae la cara de vergüenza, empezando por el mal llamado poder ejecutivo puesto que no ejecuta, muchas veces, lo que tiene que ejecutar; es más, creo que a veces no sabe dónde está, aunque nosotros, el pueblo, sí lo sepamos: que muchas veces estamos entre la espada y la pared.
En otro país, y no muy lejano, tales hechos hubieran provocado una reacción inmediata. Sarkozy, no hace mucho, ante un hecho parecido, amenazó con suspender, de entrada, el partido, cosa que aquí no sólo no se ha mencionado, ni siquiera lo habrán pensado no vaya a ser que alguien se moleste.
No soy el único que opina que, si ambas aficiones no están de acuerdo con lo que representa la competición, debían haber renunciado sendos equipos, en atención a "sus respectivas nacionalidades", a jugar ducha final, lo cual, al menos sí habría sido consecuente con su pensamiento.
Espero, aunque a lo mejor es utopía, que de una vez por todas se haga respetar la ley y más, si cabe, en ocasiones como ha sido esta final de la copa del Rey.